Estamos hartos de escuchar en todos los medios la palabra "vintage", ropa vintage, muebles vintage, decoración vintage, etc... Básicamente la palabra se refiere a algo antiguo. Para que algo se considere vintage el mueble o accesorio deber ser original y anterior a los años noventa. También, accesorios victorianos de los años 20´s y 70´s, son considerados vintage.
Es un estilo elegante, romántico, basado en diseños de estilo antiguo pero utilizando accesorios vanguardistas y modernos. En el estilo vintage puro, se utilizan piezas antiguas exclusivas y de alto nivel que se renuevan o se combinan con otras más modernas de corte clásico.
Es común confundir el estilo retro con el vintage, ya que los dos evocan a tiempos pasados. Pero hay una diferencia muy importante. Mientras el estilo vintage se compone de piezas originales, el estilo retro incluye muebles y accesorios que han sido fabricados hoy, pero con un diseño basado en tiempos anteriores.
El color base de ésta tendencia es el blanco o blanco roto, mientras que los accesorios y el mobiliario pueden ser colores vivos o tonos pastel. Los estampados de flores son los protagonistas absolutos y se presentan en cprtinas, alfombras, cojines, edredones, etc... Las paredes con papel florido en tono pastel son también un referente del estilo vintage.
La madera, el mimbre y la forja son los materiales más utilizados para recrear un mundo vintage.
Si quieres incorporar éste estilo en tu casa, no necesitas hacer grandes cambios, pequeños detalles como lámparas Art Deco en las mesillas, un espejo grande tipo imperio ovalado o rectangular, lámparas de araña...No te dé miedo mezclar estilos ya que eso es la tendencia, mezclar lo antiguo con lo nuevo.
Las plantas y las flores son indespensables para éste estilo, aportando frescura, color y romanticismo al ambiente.
En muebles, destaca el tipo provenzal, diseños señoriales con formas curvas y onduladas. Se inclina por colores de madera oscura (nogal, caoba o cerezo), madera en blanco roto, decapados o con detalles en color dorado o bronce.
El capitoné es el rey de la tapicería vintage.
Una de las ventajas de las piezas vintage es que puedes encontrarlas en tiendas de segunda mano por un buen precio y, probablemente, de mejor calidad que los muebles de hoy en día. Si no te convence del todo puedes restaurarlo y darle tu toque personal.
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